LA VALIENTE SENADORA DE COLOMBIA PIEDAD CORDOBA, CON LA VEDAD A FLOR DE PIEL, EN CASA DE AMERICA, MADRID (18/04/2008)
Llena de energía y vitalidad recuerdamos a una Ingrid Betancourt promoviéndose como candidata al Congreso de Colombia a elegir de 1994, con donaciones masivas de condones a los jóvenes, en un país donde las formulas anticonceptiva, distintas a las naturales, han sido reiteradamente cuestionadas por la iglesia católicos, con una fuerte incidencia en la política colombiana.
LAS PRUEBAS DE SUPERVIENCIA DE LOS SECUESTRADOS POR LAS FARC
En ese ambiente colombiano también movido por las más profundas pasiones de amor y muerte, la inquieta exponente de una lucha contra la corrupción se aleja del partido Liberal al que había llegado, más por cuestiones de familia que de ideas, y organiza el Movimiento Oxigeno Verde, que pretendiendo defender la naturaleza y el medio ambiente, intentaba a la vez llenar de ideas nuevas para oxigenar, el raquítico partido Liberal que no encuentraba, y aún hoy, su oriente ideológico, que sigue sumido a una rancia derecha, hoy con evidentes vínculos y directos, con el paramilitarismo.
Con fuerza, en la búsqueda de abrirse paso hacia una posible consulta popular que le permitiera llegar airosa al liberalismo y así reencontrarse con sus afines, se abalanzo sobre una de las zonas que llenaba más de fama, que de popularidad, a quienes la pisaban, eso si, bajo el manto de zona de despeje que había sido ordenada por el entonces Presidente de Colombia, Andrés Pastrana, para que las FARC, determinaran y asignaran las notas a los demócratas, por el progreso y las paz, y los favores de la izquierda hacia unos, u otros de esos candidatos que solían con ellos pactar.
A esa macabra posibilidad, sin el permiso del Gobierno y por supuesto sin el de las FARC, se adentro Ingrid Betancourt con la esperanza de salir airosa en su campaña por el Caguan, intentando conseguir aumentar la fama en su osadía, y que termino convertida en pesadilla, porque las FARC, no dispuestas a soportar intromisiones que no estuvieran debidamente controladas, al más tradicional estilo de aquellos capos que en la Catedral de Envigado listaban los civiles y políticos para sus visitas, la foto de la fama, o pasearse por sus campos, llegaron a considerar la presencia de la candidata en la zona, como un acto irreverente, o una avanzada de la derecha para pretender reconquista políticamente lo que había estado al servicio de las FARC con la venia del establecimiento, aún así se hubiera terminado el despeje.
Esta intromisión de la Candidata a la Presidencia de Colombia, con el escaso 1% de popularidad, le sirvió de justificación a las FARC para implicarse en un hecho que modificaría toda su conducta pasada, con una declaratoria de guerra a todos los políticos civiles, que inmersos en la legalidad, no pactaran previamente con sus intereses, o no estuvieran sujetos a sus condiciones, dando así por terminada es practica que por años mantuvieron de acercarse a los demócratas de otros partidos, tal como lo hicieron con, Jaime Pardo Leal, Pernia, y Alvaro Leyva, y pasaron a exigir definiciones a los políticos a favor de la causa Fariana, so pena del secuestro, del aniquilamiento, o de la presión sobre quienes no aceptaran sus proyectos, o sus simpatías en lo estratégico.
Historias posteriores, como el secuestro y muerte en cautiverio de los Diputados del Valle del Cauca, vienen a corroborar dicha declaratoria de guerra a la clase política colombiana, y a sectores de la sociedad civil de Colombia, y hoy, siete años después, ese viraje en la política de las FARC, de cambiar el coqueteo a los “demócratas de los partidos tradicionales e intelectuales", y pasar a la declaratorio de guerra, los tiene sin oxigeno, porque intentando quitarle el aire a la política tradicional, o electorera, inciada con el secuestro de la candidata Ingrid Betancourt que simbolizaba esa otra alternativa, las FARC pueden estar hoy tan agónicas en su proyecto político, como la retenida Ingrid Betancourt, sin ese oxigeno que ayer daban intelectuales, o democrátas, y con la misma hepatitis B, o D... Derecha, porque esa enfermedad estimula más las política guerrerista de la derecha y debilita la izquierda democrática de Colombia.
Así que para que se de la entrega de la Ex Candidata y la de los otros civiles secuestrados, vivos, o muertos, a sus familiares y a la sociedad civil a la cual siempre han pertenecido, las FACR, necesitan una autocrítica a fondo, o una definición sobre sus posibles coaliciones en la construcción de un frente democrático, modificando con ello la confrontación a los democratas, e intentando recuperar al menos, el camino deshecho, para un timido acercamiento que pasa por la liberación unilateral de los retenidos y secuestrados.
De allí que esa organización de allenda, en la cual muchos sectores de izquierda democrática, siempre creímos que podía aportarle al país un aroma de esperanza por la justicia social y la paz, al optar hoy por la confrontación directa a los demócratas no comunistas, termina por quitarse ella misma ese oxigeno que la alentaba en algo su sentido ético y la èpico de su lucha.
La liberación unilateral de los secuestrados de darse, sería sin lugar a dudas la confirmación de las fraternas relaciones al reconocimiento político que hizo el Presidente Chávez a las FARC, y un aval a la causa humaitaria de la Senadora Piedad Cordoba en representación de los familitares de lo secuetrados y retenidos, para encarar como ha de ser, una legítima aspiración hacia la presidencia de Colombia. Pero también, sería esa liberación de manera fundmantalmental, la puesta en marcha de una esperanza para el acercamiento, o el reencuentro de las FARC, con los demócratas de Colombia, a los cuales hoy los tienen a kilómetros de distancia, por no decir, en la otra frontera del río, siendo éstos vitales para conformar los nuevos ingredientes que hagan vital la solución al conflicto colombiano. y no el cheque o el talón de siempre, a los rebeldes incorporados o reinecertados, para la compra de un taxi.
opoXiXion, no puede más que incitar a que las FARC hagan esa revisión, a que esa concepción maniquea de la política cristiana, que supone como enemigo al que no esta con uno, se abandone y de nuevo entendiendan que en política, la diversidad es la madre de la evolución, del progreso y la paz.
A última hora hemos escuchado en Madrid a la Senadora Piedad Cordoba decir que el proceso está congelado por los hechos que ha narrado, pero en últimas, consideramos, que quienes tienen la última palabra sobre los secuestrados y retenidos por las FARC, son las propias FARC, y han de ser ellas quienes pongan el material para descongelar el tema, y para acelerarlo con hechos políticos, que aún siendo unilaterales, para la comunidad internación derivan en obligaciones, especialmente con relación a Venezuela.
POR LA VERDAD, LA JUSTICIA Y LA REPARACION
JUICIO UNIVERSAL A GENOCIDAS
